- El próximo Presidente de México “se caracteriza por el uso de trajes demasiado amplios”.
- Con la visita de una comitiva de EU, López Obrador inició un periplo como líder político de talla mundial.
- Cada político tiene sus propios estilismos que los diferencian de otros.
- Un líder debe mostrarse siempre impecable y profesional.
Andrés Manuel López Obrador, virtual presidente electo de México, “proyecta transparencia de sus ideas y convicciones políticas en su forma de vestir con traje, particularmente por el uso de camisas de color blanco”, sin embargo, debe revisar el uso adecuado del código de vestimenta a fin de proyectar con certeza el mensaje como un líder mundial, así concluyó un análisis de imagen pública a diversos líderes políticos del planeta.
El estudio, realizado por Justo Grau Sartorial —doctor en comunicación e imagen pública—, determinó que el próximo Presidente de México “se caracteriza por el uso de trajes demasiado amplios, lo que perjudica a la hora de estilizar a los hombres. Las hombreras sobredimensionadas, los camales y mangas demasiado amplios y largos, son muy comunes en el ámbito de la política.
“Asimismo, utiliza con demasiada frecuencia el mocasín, algo que según las normas de estilo no es adecuado. Es muy poco común el uso del zapato de agujeta, especialmente el Oxford, que es el tipo de calzado más adecuado para acompañar al traje”, expresó el especialista.
Justo Grau Sartorial recordó que López Obrador recibió una comitiva de alto nivel del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump —encabezada por Mike Pompeo, secretario de Estado de la unión americana— donde el líder tabasqueño evidenció, en su forma de vestir, el inicio de un periplo como líder político de talla mundial.
“Su colorimetría es suave, por lo que debería llevar corbatas de colores pastel, y muy al contrario, los colores que suele utilizar son demasiado intensos”, recomendó el también maestro en alta sastrería, quien viste y asesora materia de imagen, a diversos líderes de todo el mundo.
Al comparar los estilos de los políticos de diferentes naciones, agregó Justo Grau, “uno se da cuenta de que la globalización ha tenido su efecto sobre los códigos de vestimenta en la política, pero la mayor parte de las regiones tienen sus propias particularidades.
“Y es que la elegancia no es exclusiva de una región o de un grupo social determinado por lo que cada político tiene sus propios estilismos que les diferencian de otros. Un líder debe mostrarse siempre impecable y profesional.
“En el estilismo político no funciona la fórmula me gusta, no me gusta; en lo que debemos fijarnos para valorar la apariencia de un dirigente es en el nivel de concordancia existente entre su ideología y su vestimenta es decir, el mensaje verbal y no verbal que quiereproyectar”, resaltó.
Los europeos, especialmente en los países más industrializados, tienen fama de serios y sobrios −con la excepción de Italia−, son poco dados a tomar decisiones precipitadas y gustan por las cosas discretas y decalidad.
En este sentido, el actual presidente de Francia, Emmanuel Macron, así como sus antecesores François Hollande y Nicolás Sarkozy son el claro ejemplo de sobriedad europea. “Los trajes de los líderes franceses son, de manera particular, de color gris oscuro, negro, azul marino o azul noche, que siempre combina con el mismo color en sus corbatas. Utiliza esta última siempre en colores lisos con total ausencia de rayas, lunares o dibujos. Las camisas que utiliza son blancas y en contadas ocasiones, azul cielo”.
En el caso del Pedro Sánchez, presidente del gobierno de España, dijo que éste “es un político sobrio en su vestimenta, sabe utilizar correctamente la psicología del color en sus corbatas, con frecuencia usa el rojo en sintonía con el color de su partido, y las llega a utilizar con líneas diagonales cuando quiere mostrar una imagen con connotaciones de dinamismo.
“Por último, sabe perfectamente los momentos y situaciones en las que debe olvidar la corbata para así denotar jovialidad y cierto grado de informalidad. No utiliza jamás las mancuernillas, muy probablemente para desligarse de la connotación clasista que tiene estecomplemento”.
Sobre Donald Trump, presidente de los Estados Unidos de América, Justo Grau resaltó que el mandatario estadounidense viste siempre con los colores de su país. “Sus trajes son azules, en diferentes tonos; sus camisas blancas, utiliza casi siempre en rojo en sus corbatas con frecuencia en líneas diagonales, lo que denota dinamismo y acción”.
“En cuanto a la hechura de sus trajes, Trump gusta de sobredimensionar sus hombreras y en general el resto del traje, lo que denota cierto descuido e indiferencia. Esto último también se ejemplifica con la longitud de sus corbatas, que siempre es excesiva.
“Se rehúsa a olvidarse de la corbata cuando la situación lo requiere, lo cual es un error, pues en ocasiones, los líderes mundiales deben relajar la formalidad de sus estilismos en pro de una mayor cercanía con el país quegobiernan”, dijo Grau Sartorial.