La 60 Legislatura del Estado de México aprobó, como integrante del Constituyente Permanente, la minuta de reforma constitucional en materia educativa enviada por la Cámara de Senadores del Congreso de la Unión.
En sesión del Segundo Periodo Extraordinario, presidido por la diputada Karla Leticia Fiesco García (PAN), los legisladores aprobaron, con el voto en contra del PAN, la minuta con proyecto de decreto para reformar, adicionar y derogar diversas disposiciones de los artículos 3, 31 y 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia educativa.
La reforma impulsada por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, que reafirma la rectoría del Estado sobre la educación y establece que éste debe garantizar la educación en todos sus tipos y niveles, desde la inicial hasta la superior, fue leída en el Pleno por la legisladora Iveth Bernal Casique (PRI).
La modificación a la Constitución abroga la Ley General del Servicio Profesional Docente y la Ley del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), con lo que se eliminan las evaluaciones que afectan la permanencia de los maestros en el servicio, así como los procesos de admisión, promoción y reconocimiento hasta que se emitan las disposiciones legales correspondientes y el Congreso de la Unión expida la ley para la creación del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros.
Establece también la sustitución del INEE por el Centro Nacional para la Revalorización del Magisterio y la Mejora Continua de la Educación.
Asimismo, se suspenden las leyes secundarias, reglamentos, acuerdos y disposiciones de carácter general contrarias al Acuerdo Educativo Nacional, por lo que solo quedarán vigentes las disposiciones que facultan a la actual Coordinación Nacional del Servicio Profesional Docente para proveer las medidas necesarias y dar cumplimiento a los procesos derivados del Servicio Profesional Docente. Este decreto garantiza el respeto a los derechos adquiridos por las maestras y maestros.
La reforma educativa impulsará una educación de carácter integral, inclusivo, multicultural y con perspectiva de género; se ampliará el plan de estudios para incluir la enseñanza de civismo, lectoescritura, literacidad, protección del medio ambiente y educación sexual y reproductiva, y se promoverán acciones para mejorar las condiciones de vida de los estudiantes en las escuelas de educación básica con alta marginación.