En el corazón de la tierra mazahua en la entidad, Alfredo del Mazo, candidato al gobierno de la entidad por la coalición PRI, PVEM, Nueva Alianza y Encuentro Social, presentó sus propuestas para lograr que los centros de salud que existen en el territorio mexiquense tengan más médicos, enfermeras, medicinas suficientes y estén abiertos para la atención de la población los siete días de la semana.
En reuniones por separado, realizadas en la comunidad de San Pedro El Alto, en el municipio de San Felipe del Progreso, y más tarde en San Pedro de los Baños y en Concepción de los Baños, en Ixtlahuaca, reiteró su compromiso por impulsar acciones para que las familias mexiquenses tengan más acceso a servicios de salud de calidad.
El candidato de la coalición al gobierno mexiquense se comprometió además a impulsar unidades móviles de atención para las comunidades y clínicas especializadas para atender a las mujeres.
Del Mazo reconoció que en la actual administración estatal se han logrado grandes avances en materia de infraestructura, como la construcción de 122 centros médicos, pero también reconoció que es muy importante dotarlos de médicos, equipo y medicina necesarios para la demanda de la comunidad.
Luego de un recorrido, donde saludó a los integrantes de estas comunidades de la “gente del venado”, Del Mazo recordó que una vez en el gobierno, no sólo mantendrá los programas sociales que hoy benefician a miles de familias de toda la entidad, sino que además impulsará su crecimiento para que cada vez lleguen a más familias.
En este sitio, se comprometió además a impulsar el apoyo necesario para conservar la riqueza de la lengua y la cultura de los pueblos originarios de la entidad, así como la integración de programas para comercializar, promover y vender las artesanías que producen.
Las frases de “Najo bi ñee ka in gumu joo bienje” (bienvenido a casa en mazahua) se oían y se leían en las cartulinas, entre los sombreros típicos de la zona y las enaguas tableadas de colores vivos, las mejillas tostadas por el sol y los muchos mandiles que portaban las mujeres, como muestra de llevar las riendas de su hogar. “Van a tener más servicios de salud para que estén tranquilas cuando sus hijos se enfermen”, les comentaba Del Mazo en su diálogo con estas afectivas comunidades.
En San Felipe El Alto la comunidad mazahua abrazó a Alfredo Del Mazo, le regaló un chaleco de lana y le puso un collar de flores, como signo de hospitalidad. El candidato escuchó peticiones sobre servicios públicos y de salud.
Al entrar a una tienda de abarrotes, doña Rosa González le dijo, entre estambres e hilos de colores: “gracias a los priistas hemos tenido escuelas y hospitales, nosotros no miramos a ninguno más que a usted, porque los otras son unas desconocidas”. Les tomaron una foto y pronto la señora volteó a decirle a las personas que la acompañaban: “ahora me van a respetar eh? porque ya me abrazó el candidato”. Risas de todos.
Y al grito de “mora toji” (vamos a ganar) en Ixtlahuaca le entregaron el bastón de mando, mientras las mujeres le colocan un collar con pan típico de la región y le expresaban en mazahua “mizhokimi ra boski”(dios te bendiga).