Por Julio Requena
Muchas son las evidentes características de un pésimo transporte público en el Estado de México que se vienen a la mente cuando los permisionarios y concesionarios de este servicio amenazan con subir su costo en un 40 por ciento y que mientras no se corrijan la ciudadanía no estará dispuesta a pagar más.
Entre ellas, recuerdo los casos de violación y asesinato de jovencitas en combis del Valle de México, los recurrentes asaltos a pasajeros en sus unidades tanto del valle de Toluca como de la zona conurbada a la Ciudad de México y en la zona Oriente no se diga. Los dueños se han negado a instalar cámaras, botones de pánico, GPS y algunas otras medidas que pudieran inhibir a la delincuencia.
Es cierto que, quien debe prestar la seguridad pública a la ciudadanía es el Estado, pero que podríamos decir en los casos en los que los delincuentes están coludidos con los choferes o con las líneas para perpetrar sus atracos. En los casos de las jovencitas asesinadas en una combi en el valle de México, se retiró la concesión a toda esta ruta, por qué no se hace lo mismo con todos los demás casos.
Se ha sabido del caso de taxis colectivos que viajan al municipio de Tenancingo, donde se han desviado de su ruta, se han metido a la zona boscosa y han despojado de sus pertenencias a los usuarios y a las mujeres se les ha agredido sexualmente, entonces cómo es que se puede pensar en un aumento al pasaje, solo para que los dueños cobren más ganancia o recuperen ‘pérdidas’ económicas cuando la gente no recupera la tranquilidad de viajar.
Las unidades son viejas, huelen mal, los choferes van echando carreras por ganar el pasaje, no respetan el reglamento de tránsito, hacen paradas continúan en lugares no permitidos, no tienen un trato especial a discapacitados, adultos mayores o niños, mujeres embarazadas, muchos usuarios parados como en latas de sardinas o bien, vacíos dando vueltas a lo tonto.
En qué pudieran justificar su aumento del 40 por ciento al transporte si no es en el ofrecimiento de un mejor servicio, si solo lo justifican en su necesidad como dueños o concesionarios, no hay fundamento y es muy claro: SI YA NO ES NEGOCIO, RETIRENSE déjenle el espacio a otros proyectos de transporte público eficiente, cómodo, barato y que piense primero en el usuario y no solo en las ganancias.
Así de clara es la postura de la ciudadanía frente al tema del aumento al transporte público y su queja de los transportistas.
PARA LA AGENDA LEGISLATIVA… Comienza a acentuarse una clara política legislativa donde MORENA ha mostrado y usado su mayoría para aprobar las iniciativas que son de su interés, dando pasos hacia el cumplimiento de las promesas que hizo a la gente y fortalecer las políticas que marca el gobierno federal encabezado por Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, también se está acentuando el hecho de que bancadas como el PAN, PRI y el PRD en la búsqueda de reflectores han tomado temas como las guarderías o los comedores comunitarios que han sido votadas en contra por la mayoría y se han desechado, por lo que tal vez habría que usar más inteligencia para destacar en la opinión pública antes de perder la votación en el pleno legislativo.
Esto es solo una sugerencia. Porque quizá se les empiece a ver como defensores de las causas pérdidas, lo cual en nuestros tiempos es una “etiqueta” difícil de llevar, sobre todo ante la gente que observa el desempeño de las fuerzas políticas estatales.