Por Julio Requena
La transición entre los actuales ayuntamientos y los nuevos gobiernos municipales puede ser tan complicada o sencilla como se quiera. Muchos de ellos cambiarán de color y algunos donde también gobernará el mismo partido tampoco se puede asegurar que el cambio sea fácil, por eso es necesario que los alcaldes salientes ya se preparen para la entrega recepción, y empiecen a trabajar en dejar buenas cuentas, pese a que la voluntad ciudadana les haya volteado la espalda.
Lo básico que deben saber es lo siguiente:
1.- Hoy son alcaldes salientes, perdedores sí, pero si descuidan trabajar en su imagen la gente los empezará a ver como ladrones, saqueadores, rateros y corruptos, además de inútiles o vividores del erario público. Digan lo que digan, si la gente voto en contra es porque considera que no trabajaron. Hoy hay que esforzarse por dar pruebas del trabajo y que más personas se enteren de ello.
2.- Hay que vacunarse o curarse en salud. Durante estos meses hay que difundir todos los logros con gran ánimo para que cuando lleguen los nuevos alcaldes no puedan desprestigiarlos ni construirles una imagen a modo. Recuerden que los presidentes salientes siempre son los villanos, los culpables de todos los males, incluso de la inexperiencia de los que van llegando.
3.- Hay que ordenar las auditorias ahora y tener los resultados publicados, para que cuando lleguen los nuevos ediles, ya no puedan desvirtuar los resultados de las mismas o pedir nuevas auditorías de los mismos temas u obras.
4.- Hay que trabajar fuertemente en la comunicación de Legado, es decir, que le vamos a dejar a los municipios como huella o prueba de que se hicieron bien las cosas, por lo menos de manera administrativa y financiera, dado que en lo político si se perdió fue por otros fenómenos sociales.
Muchos comunicadores y alcaldes me comentan que, ellos tienen buenas cuentas –que nadie sabe ni supo antes de la elección- que no necesitan de comunicación, que hay otras prioridades en que invertir, y que si las nuevas administraciones los acusan de malos manejos o de ladrones o de saqueadores, convocarán a una rueda de prensa para aclarar las cosas.
Mi respuesta es simple: si hoy que tienes el poder, los medios no te escuchan ni hacen eco de tus ‘buenos resultados’ –y eso que les pagas- que te asegura que el día de mañana van a correr a escucharte, cuando el poder y el dinero lo va a tener otro. Recurriré a los amigos –reviran-. Pero si hoy estas tratando mal hasta a tus amigos, crees que para enero te quedaran muchos?, contesto.
Bueno, hay quien aprende a tiempo y quien aprende por la mala que, cuando no lo hizo cuando pudo, cuando quiera ya no lo va a poder hacer o tendrá que sacar de su bolsa para pagar desplegados, aclaraciones y versiones que sus adversarios aplacaran sin el menor esfuerzo ni desgaste, pues como siempre todo irá con cargo al erario. Muera el Rey, Viva el Rey.
Para los entrantes lo básico también es muy claro:
1.- Solicitar auditorias de todo. Financieras, de obra, administrativas e incluso el juicio político de la sociedad que raye en el linchamiento social de los perdedores, por ladrones, rateros, corruptos e ineptos.
2.- Acercarse equipos de trabajo eficientes. Buscar a las personas adecuadas para que los apoyen a dar los mejores resultados desde el primer día. Es válido incluir al equipo de campaña, a los amigos y a todos, siempre y cuando se tenga el personal que pueda sacar adelante la ‘chamba’. Un alcalde, dicen, no está obligado a saberlo todo, pero si está obligado a rodearse de gente que lo sepa, que sea bueno en las áreas que estarán a su cargo. La ciudadanía espera resultados desde el primer día, pues cada vez es más exigente y lo demostró en las urnas.