Por Julio Requena
En los 125 ayuntamientos del Estado de México ha comenzado la transición mediante la instalación de los equipos entre el gobierno saliente y el entrante, por lo que el cambio en las administraciones es irreversible y en la mayoría de ellos se ha llevado con civilidad, respeto y profesionalismo.
Sin embargo, hay un tema que todavía no queda muy claro en la mayoría de ellos y es el tema de la equidad de género o la participación de las mujeres en los nuevos gobiernos. Ciertamente venimos de un proceso mediante el cual se impulsó la participación de las mujeres en una cuota de 50/50 en la integración de las planillas de todos los partidos políticos participantes lo que arroja en los cabildos una mayor presencia del género femenino.
No obstante, qué pasa en la integración de los nuevos gobiernos. Dónde están las mujeres que ocuparán cargos de dirección?. Dónde están los cuadros femeninos que tendrán un lugar destacado en la conformación de la nueva forma de gobernar en los ayuntamientos mexiquenses o dónde están las mujeres que están luchando por un espacio de gobierno para demostrar que también pueden dar buenos resultados administrativos y no solo en las posiciones de representación popular donde la ley ya les ha ganado una cuota.
Organismos de mujeres que han luchado por el impulso de la mujer en la vida política del Estado de México deberían estar atentas a este tema, pues para muchos constituye el siguiente paso en la participación femenina para la consolidación de su presencia y no solo conformarse con las candidaturas.
No deseo desatar una polémica, pero a mi juicio, los cargos directivos representan más un logro por capacidad que por cuota como se establece en ley para las candidaturas partidistas, sin embargo, en muchos de los municipios del valle de Toluca cuando se habla de los futuros gobiernos faltan mujeres.
En municipios como Zinacantepec, Almoloya de Juárez, Metepec, Toluca, Ixtlahuaca, Atlacomulco, Ocoyoacac y otros, no hay o son muy pocos los nombres de mujeres que se mencionan hasta el momento para ocupar cargos públicos de primer nivel en los Ayuntamientos.
Por ejemplo, en el municipio de Metepec aunque la presidencia será ocupada por una mujer, no se han generado más nombres de mujeres que la vayan acompañar a gobernar, la mayoría de quienes se mencionan son varones.
De igual manera pasa en Toluca, donde el equipo de Juan Rodolfo Sánchez Gómez ha anunciado que reducirá las direcciones, pero quienes le han acompañado hasta este momento en conferencias de prensa y equipo de transición han sido varones. La única mujer que se menciona con la cercanía suficiente con el futuro alcalde es Rocío Pedraza a quien muchos ya la ven trabajando en la parte del desarrollo social del ayuntamiento.
No es para nadie desconocido que la ex síndico, Rocío Pedraza y Juan Rodolfo tienen la empatía para hacer equipo de gobierno, pero no se le ha visto en las conferencias, ni en el equipo de transición, por lo que no se puede confirmar que ya hay una mujer en el futuro gobierno hasta que Sánchez Gómez lo confirme o dé a conocer a los integrantes de su gabinete.
Casos como Zinacantepec y Almoloya de Juárez han sido mencionados como gobiernos misóginos, dado que sus futuros alcaldes no están considerando la integración de mujeres en sus administraciones y justifican que la equidad de género fue únicamente para la integración de las planillas, por lo que con los espacios ganados en el cabildo deberán conformarse.
Mientras que por ejemplo, gobiernos que fueron reelectos como Lerma o San Mateo Atenco, ambos priístas, tampoco apuntan a la modificación de sus equipos de dirección para integrar más mujeres en espacios de liderazgo o proyección profesional.
Veremos si esto cambia en los próximos días con el anuncio de los cargos en los gabinetes municipales, para confirmar el avance o el retroceso en este tema de la equidad de género, que exige más profesionalismo que una cuota política.