El Grupo Parlamentario del PVEM en la 60 Legislatura presentó dos puntos de acuerdo en favor de las trabajadoras del hogar; uno de ellos, para que la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem) ejecute programas para erradicar la discriminación hacia este sector, y el otro, para que la Secretaría del Trabajo difunda las reformas a la Ley Federal del Trabajo y a la Ley del Seguro Social sobre sus derechos laborales reconocidos.
Al dar lectura al primer punto, el diputado José Alberto Couttolenc Buentello, coordinador de la bancada, explicó que el propósito es exhortar a la Codhem para que establezca programas específicos de atención a las trabajadoras del hogar que hayan sufrido algún tipo de discriminación o violencia, y para que realice, promueva y difunda campañas sobre el tema.
Señaló que las trabajadoras del hogar son una parte fundamental del desarrollo económico del país y de la inclusión de las mujeres en el ámbito laboral, y que, sin embargo, son un sector olvidado y pocas veces se valora su trabajo; son profundamente discriminadas y consideradas como personas de menor valía, además de que los empleadores ejercen violencia sobre ellas.
En este sentido, aseguró que los legisladores deben garantizar que todos los seres humanos sean tratados de manera digna, que no se les violente ningún derecho fundamental y que siempre haya un trato respetuoso e igualitario.
El legislador indicó que en México, de acuerdo con el INEGI, poco más de 2.2 millones de personas se dedican al trabajo doméstico remunerado; 90% son mujeres, una de cada tres no concluyó la primaria, tres de cada diez no finalizaron la secundaria y una de cada tres son de origen indígena. Según la encuesta Percepciones sobre el trabajo doméstico, elaborada por el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), 90% de las trabajadoras del hogar desconocen que exista alguna legislación que garantice sus derechos.
Aunado a estos datos, mencionó que los principales abusos de los que han sido objeto las trabajadoras domésticas son: discriminación por ser indígenas, en 33%; prohibición de hablar su lengua madre, 25%; despido injustificado y acusaciones de robo, 16%.
A 16% les han revisado sus pertenencias; 12% han sufrido maltrato verbal o acoso sexual en un 12%, y 11% han sido discriminadas por ser trabajadoras del hogar. Estas cifras, señaló el diputado, evidencian los problemas a los que se enfrentan, los cuales requieren ser combatidos y erradicados.
Este punto de acuerdo fue remitido a las comisiones legislativas de Derechos Humanos y de Trabajo, Previsión y Seguridad Social, para su análisis y dictamen.
VISIBILIZAR Y DIGNIFICAR EL TRABAJO DOMÉSTICO
La legisladora María Luisa Mendoza Mondragón, al dar lectura al segundo punto de acuerdo, precisó que este pretende exhortar a la Secretaría del Trabajo a difundir la reforma de julio pasado a la Ley Federal del Trabajo y a la Ley del Seguro Social en materia de trabajadoras del hogar, con énfasis en sus derechos laborales reconocidos, así como del programa piloto implementado por el Instituto Mexicano del Seguro Social con el objeto de incorporar a dicho sector al régimen de seguridad social.
Al hablar de la ausencia de regulación que históricamente ha tenido el trabajo doméstico, la diputada destacó la necesidad de valorar y proteger el trabajo de las más de 2.3 millones de trabajadoras que todos los días tienen que sufrir vejaciones, discriminación y condiciones laborales de explotación e incluso esclavitud. “No es posible que en pleno siglo XXI permitamos este tipo de abusos”, añadió.
Ante esta situación, la diputada pidió trabajar de manera conjunta con los sectores de la población para dignificar y visibilizar el trabajo del hogar en beneficio de la sociedad y por el bien de quienes lo desempeñan y sus familias.
Citó cifras del Conapred que muestran que la razón principal por las que las trabajadoras domésticas se emplean es la necesidad económica (33%); la falta de escolaridad, con19%, así como la falta de opciones laborales, con 13%.
Mencionó que la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo arrojó, al cuarto trimestre de 2017, que más de un tercio de este sector percibía menos de un salario mínimo, y que más del 63.31% de las trabajadoras del hogar no obtuvo ninguna prestación laboral como aguinaldo, vacaciones con goce de sueldo, seguridad social o reparto de utilidades.
En este sentido, enumeró los beneficios que brindaría la afiliación de este sector a la seguridad social, entre los que se encuentra el goce de los servicios médicos, hospitalarios, farmacéuticos y atención obstétrica; seguro por incapacidad, de vida y pensión por invalidez; fondo para el retiro y prestaciones sociales como velatorios y guarderías.
Este punto de acuerdo, al que pidió sumarse la diputada Araceli Casasola Salazar, del PRD, fue remitido a las comisiones legislativas de Trabajo, Previsión y Seguridad Social y de Salud, Asistencia y Bienestar Social para su análisis y dictamen.