Sus objetivos son evitar la reincidencia delictiva, lograr la reinserción social y rehabilitar en el uso de las drogas.
Gracias al Tribunal de Tratamiento de Adicciones TTA del Poder Judicial del Estado de México, Emmanuel de 23 años obtuvo una nueva oportunidad de vida, recuperó a su familia y continúa estudiando, tras superar su adicción al consumo de sustancias psicoactivas.
Aunque el camino no fue fácil, luego de revisiones periódicas, pruebas de antidoping y acompañamiento psicológico superó su dependencia a la cannabis y cocaína, concluyendo el programa que le permitió fortalecerse como persona.
“Con mis terapias entendí que debo aprovechar la vida porque las drogas destruyen las cosas más importantes, a la persona y a la familia”, comentó.
Acompañado por su mamá y hermano mayor, Emmanuel asistió a la audiencia de suspensión condicional del proceso, en la que Edgar Garay Vilchis, juez de Control especializado en materia de tratamiento de adicciones, decretó extinta la acción penal y determinó el sobreseimiento de la causa.
En entrevista, contó que a los 13 años se inició en el consumo, motivado por seguir a compañeros de la escuela; sin embargo, poco a poco incrementó las dosis y frecuencia, lo que ocasionó que se alejara de su familia.
A sus 20 años fue detenido por portación de marihuana y aceptó ingresar al programa que -asegura- le cambió la vida, pues gracias al apoyo de los TTA tomó un curso de barbería y desde hace año y medio ejerce ese oficio; además, para ayudar a otras personas cursa la Licenciatura en Derecho.
Reconoció que dejar una adicción es difícil y requiere mucha fuerza de voluntad, pero gracias a la ayuda del grupo interdisciplinario formado por el PJEdomex, el Instituto de la Defensoría Pública, la Fiscalía Especializada, el Instituto Mexiquense contra las Adicciones y la Secretaría de Seguridad Pública, trazó un nuevo camino para mejorar.
A este caso de éxito se suma el de Diego y Adalberto de 19 y 28 años de edad, quienes, tras nueve y seis meses de trabajo, respectivamente, la semana pasada también se graduaron del Programa de Justicia Terapéutica.
El juez del PJEdomex, recordó que los TTA brindan una segunda oportunidad a quienes cometieron un delito bajo los influjos de sustancias psicoactivas, sus principales objetivos son evitar la reincidencia delictiva, lograr la reinserción social y rehabilitar en el consumo de sustancias psicoactivas.
Si bien indicó que el reto de este programa es seguir creciendo, reconoció que graduaciones como estas son el resultado del trabajo coordinado entre las instituciones para brindar el derecho de acceso a la justicia, resolver los problemas legal y de salud que conllevan este tipo de casos, así como restaurar el tejido social.