- La arqueóloga Vladimira Palma Linares, aseveró que la elaboración del mezcal en municipios mexiquenses como Zumpahuacán y Malinalco tiene una gran profundidad histórica que se remonta a la época colonial.
Tenancingo, Méx.- En los estados de Guerrero y Morelos pudo ocurrir la conjunción de las tecnologías árabe –que llegó con los españoles-, filipina y prehispánica para destilar diversos productos como frutos y el propio agave y que hasta la fecha se ocupa en el sur mexiquense para la elaboración de mezcal, sostuvo la profesora e investigadora del Centro Universitario Tenancingo de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), Vladimira Palma Linares.
La arqueóloga aseveró que la elaboración del mezcal en municipios mexiquenses como Zumpahuacán y Malinalco tiene una gran profundidad histórica que se remonta a la época colonial.
Palma Linares, integrante del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), refirió que para conocer el origen histórico de la destilación del agave en el sur de la entidad se lleva a cabo un trabajo de investigación.
Indicó que a finales del siglo XVI se dieron una serie de interacciones en toda la costa del pacifico mexicano, en estados como Guerrero, Colima y Nayarit, que tuvieron como resultado, entre muchos otros fenómenos, la conjunción de tecnologías con las que ya existían en Mesoamérica.
En la destilería “La Perla”, ubicada en el municipio de Zumpahuacán, uno de los lugares en los que se analiza la conjunción de esas tecnologías, señaló que en esta zona mexiquense es común el uso de destiladores muy parecidos al filipino, con troncos ahuecados de zompantle, árbol endémico de México.
“Analizamos si sería el destilador filipino combinado con el árabe, es decir, con un alambique de cobre con un serpentín. Al parecer, aquí se da la conjunción de ambos”, dijo.
El principal objetivo de este trabajo, precisó, es identificar la profundidad histórica de esta tecnología, con la finalidad de saber desde cuándo se destilan mezcales en la zona.
Abundó que a través de la Licenciatura en Arqueología del Centro Universitario Tenancingo de las UAEMéx se abordan diversas líneas temáticas. “No solo trabajamos sociedades del pasado, las cuales son sumamente importantes y con las que nos relacionan generalmente a los arqueólogos, también trabajamos una línea que se llama etnoarqueología, es decir, arqueología, pero en sociedades del presente”, dijo.
Cabe destacar que, con la participación de alumnos, en este municipio también se llevan a cabo estudios sobre procesos de elaboración de textiles. “A lugares como éste los estudiantes vienen a aprender cómo se realizan los estudios etnoarqueológicos y como resultado vamos a tener publicaciones y trabajos de tesis”, concluyó Vladimira Palma Linares.