Transitar a vehículos eléctricos, que la gasolina cuente con menos plomo y ampliar el uso del transporte público, propuso el diputado Gerardo Pliego Santana como algunas de las acciones para disminuir la emisión de gases de efecto invernadero, durante la presentación de la conferencia magistral “Desarrollo sustentable y cambio climático: retos y perspectivas”, que impartió el investigador de la UAEM, Edgar Hernández Quiroz. Ante el ex alcalde de Toluca y actual presidente de la Asociación Vasco de Quiroga: Presencia en el Siglo XXI, Armando Enríquez Romo, estudiantes de la UAEM, así como de las universidades de las Tres Culturas y de la Siglo XXI, el presidente de la Comisión de Protección Ambiental y Cambio Climático de la 59 Legislatura subrayó la necesidad de “generar la política pública para ir sustituyendo los combustibles fósiles por tecnologías limpias renovables”.
En este sentido, el diputado del PAN enfatizó que “México no puede estar rezagado en estos temas fundamentales para la mitigación del calentamiento global”, lo cual debe atenderse en el corto, mediano y largo plazo desde la creación de políticas públicas y la legislación, como en su momento fue la expedición del Código para la Biodiversidad del Estado de México.
“Es grato participar en este tipo de eventos, porque nos retroalimenta sobre temas que desde hace algunos años atañen a la sociedad de orden mundial y que nos concierne a todas las esferas de gobierno y de la sociedad civil”, añadió.
En su oportunidad, el especialista en ciencias ambientales, Edgar Hernández, explicó que “debemos cambiar nuestra concepción del mundo, entender que es indispensable vivir en armonía con la naturaleza, conservar los recursos para que las generaciones venideras puedan aprovecharlos, puedan disfrutar del agua, la fauna y la flora, y no tengan la necesidad de comenzar a ingerir alimentos transgénicos”.
Advirtió que entre los efectos del cambio climático están las llamadas “guerras del agua” que se incrementarán, dijo, conforme aumente el número de habitantes en el planeta, toda vez que “el problema es que somos demasiados y el agua potable ya no alcanza”.
En este tenor, enfatizó que “tenemos que concientizar a la población de que ya no debemos estar contaminando y emitir gases de efecto invernadero que son los que incrementan la temperatura hasta dos o tres grados centígrados y pueden llegar a afectar el desarrollo de la vida en la tierra” en forma de constantes inundaciones o sequías que se convierten en situaciones crónicas e irreversibles.
“Si no tomamos acciones a mediano plazo para mitigar y adaptar la vida a estas condiciones llegaremos a la tercera etapa que es el incremento de la temperatura”, señaló.