- Retribución salarial para 702 maestros, reconstrucción de escuelas afectadas por el sismo de 2017, equipamiento y apertura de cinco centros de salud, así como fertilizante subsidiado para campesinos, son parte de las demandas sociales que el gobierno estatal se ha negado a realizar: Héctor Javier Álvarez Ortiz
Nicolás Romero, México.- Al gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo Maza, no le bastó con negar injustamente la retribución salarial para 702 maestros que trabajan en escuelas oficiales, la reconstrucción de escuelas afectadas por el sismo de 2017, el reconocimiento con claves de trabajo (CCT) de 12 colegios, el equipamiento y apertura de cinco centros de salud y el fertilizante subsidiado para 80 mil campesinos, sino que, además recientemente el gobernador reprimió a maestros y estudiantes, denunció el dirigente del Movimiento Antorchista en el noroeste mexiquense, Héctor Javier Álvarez Ortiz.
En el Estado de México se coarta el derecho a la libre expresión. Afirmó al indicar que el gobernador Alfredo del Mazo, a través de la policía municipal de Atlacomulco, encarceló al maestro Uriel Valdivia y al alumno Ángel Herrera, ambos de la Escuela Preparatoria Oficial del Estado de México número 262 “Crescencio Sánchez Damián”, ubicada en el municipio de Nicolás Romero, solo por el hecho de levantar la voz y manifestarse por el justo pago salarial, de nueve meses, a 702 docentes que laboran en escuelas oficiales.
Detalló que Alfredo del Mazo, desde que asumió la gubernatura, uno de sus compromisos con el magisterio antorchista fue el de reconocer con plazas la labor de los docentes que trabajaban en escuelas oficiales, pero en el mes de octubre pasado la Secretaría de Educación estatal desconoció el compromiso y dejó de retribuirles su pago a los maestros. Desde entonces, a nueve meses, los profesores han continuado con sus labores al seguir educando a 20 mil estudiantes con el objetivo de que su formación prosiga.
Pero no solo eso ha incumplido el gobernador Alfredo del Mazo, debe la reconstrucción de más de 100 escuelas que fueron afectadas por el sismo del 2017; el fertilizante subsidiado para que 80 mil campesinos no pasen hambre, y aquí, en Nicolás Romero, el reconocimiento, el equipamiento y la apertura de cinco centros de salud ubicados en Cahuacán, Francisco I. Madero, Wenceslao Victoria Soto, Azotlán y Ricardo Flores Magón, los cuales, de estar habilitados, coadyuvarían en mejorar la salud de más de 50 mil personas en 30 comunidades.
En estos momentos de pandemia el pueblo quiere alimentos, mejorar su salud, tener certeza económica y no represión. El pueblo sabrá agradecer las políticas sociales y económicas implementadas desde la gubernatura estatal o, en su defecto, también puede denunciar la indolencia, la represión y falta de justicia social de sus gobernantes, puntualizó.