Al encabezar la reunión anual de la Fraternidad Institutense, generación que atestiguó la transición del Instituto Científico y Literario Autónomo en Universidad Autónoma del Estado de México, el rector Alfredo Barrera Baca sostuvo que “la autonomía universitaria no es una moda o una graciosa concesión del poder político y menos, un capricho de la comunidad de la institución”.“Es el producto de diversos procesos históricos en los que la voluntad de generar conocimiento de manera independiente a los vaivenes políticos dio como resultado un estado en el que prevalece la racionalidad, la libertad y la verdad como ejes de la enseñanza y de la actividad científica de nuestra universidad”.
Subrayó que la Administración 2017-2021 asume la responsabilidad de preservar la autonomía universitaria en sus tres expresiones: la del propio gobierno, la académica y la financiera.
“Sabemos que sobre esos tres vértices de la autonomía universitaria descansan las libertades de catedra y de investigación, así como el libre examen y discusión de las ideas, como oficio ético e intelectual al servicio de la dignidad humana y de la verdad”.
Por otra parte, calificó a los integrantes de la Fraternidad Institutense como símbolo de la identidad universitaria y reconoció a tres de ellos por el desarrollo de sus actividades profesionales y académicas, enalteciendo el nombre de la casa de estudios que los formó.
Los galardonados fueron el médico ginecólogo Heriberto Zarate Sandoval, quien durante el periodo 1951-1952 cursó el Bachillerato de Ciencias para la Especialidad de Medicina en el Instituto Científico y Literario; Gloria Saldaña Woolrich, quien ingresó al Instituto en 1955 para estudiar la Licenciatura en Contaduría Pública, y el médico otorrinolaringólogo Tomás Ismael Azuara Salas, quien de 1945 a 1946 realizó sus estudios de Bachillerato en Ciencias Biológicas.
Alfredo Barrera Baca expresó que el pensamiento liberal de los institutenses y la lucha que se dio en diversas instituciones de educación superior de América Latina fueron consolidando diversos niveles de autonomía universitaria.
En representación de los integrantes de la Fraternidad Institutense, Atanasio Serrano López refirió que la máxima casa de estudios mexiquense ya es histórica porque cumple con su misión de fomentar el ejercicio del pensamiento libre, de mantener la libertad de cátedra como medio para el impulso de la enseñanza, la investigación y la cultura, siendo el instrumento para el cultivo del espíritu humano y de las facultades intelectuales del hombre.