Por Norma Sánchez
Llegó la época en la que se destaca más el espectáculo dentro de la política que la política misma. El espectáculo mediático se ha adueñado de las mentes de los mexicanos poco conocedores de cómo las maniobras y shows que arman ciertos políticos para hacer que la gente los siga.
Y es que la mediatización de la política está convirtiendo a muchos personajes políticos en Rockstar; o sea, personajes famosos de la farándula, con miras a hacerlo “más cercano” a la gente. A esto hay que agregarle que la explotación de las redes sociales ha hecho que la gente confíe más en la foto “improvisada” a la mitad de una caminata o en un mini video de una plática en medio de una reunión etc. Pero, ¿cuánto de esto es real? ¿Cuánto de lo que sale publicado en fotografías es realmente mostrar su trabajo real al pueblo?
Pongamos como ejemplo a Mariana Rodríguez Cantú, primera dama de Nuevo León, quien diariamente utiliza sus redes sociales para publicar su día a día al frente de la dependencia descentralizada “Amar a Nuevo León”. En dichas historias se muestra a una Mariana jugando, alimentando, abrazando y demás a niños del DIF Capullos de ese estado. Es más, en medios de comunicación y redes sociales, entre otras cosas, publicó cuando cortó su larga y bien cuidada cabellera en solidaridad con las niñas con cáncer, que entregó juguetes y que, por un fin de semana, ella y su esposo, el gobernador de Nuevo León, Samuel García, se convirtieron en padres.
Pero detrás de las sonrisas y el color rosa de las historias de Mariana se esconde un Nuevo León diferente: el 7 de enero ocurrió una riña en el Penal de Apodaca que tuvo el resultado de seis presos lesionados; recientemente sucedió la ejecución de Gil Rodríguez “El Mocos”, un reconocido comediante de Nuevo León, quien fue brutalmente asesinado. Además de que el Congreso le exigió a Samuel García, gobernador de Nuevo León y esposo de Mariana, planes contra inseguridad, covid-19 y escasez de agua debido a que el estado padece esos fenómenos y el gobernante no ha hecho nada… bueno sí: salir constantemente en las redes sociales de su esposa.
Y hay más: el 17 de enero, Nuevo León rebasó los 5 mil contagios al registrar 5 mil 179 casos; mil 108 más que el día anterior. Para desviar la atención de esa grave situación, al gobernador Samuel García y su esposa Mariana se les vio sonrientes y ufanos en medios y redes sociales debido a la acogida temporal que le dieron a un bebé de cinco meses, con discapacidad, que vive en un albergue gubernamental.
Las críticas a la pareja no se hicieron esperar, en primer lugar porque no quedó claro si hubo permiso legal de por medio para sustraer al niño del albergue del DIF, además de que expusieron en redes sociales a un menor de edad que está desprotegido, por lo que fue víctima de violación a sus derechos humanos. O sea, en redes sociales: no todo lo que brilla es oro.