Como sede alterna de las actividades de la Reunión Regional de América Latina y el Caribe “Ciudades Habitables e Inclusivas: el Reto Global de la Urbanización Sostenible”, rumbo a Hábitat III, la 59 Legislatura mexiquense recibió a académicos, investigadores, organizaciones civiles, servidores públicos y ciudadanos de Haití, Argentina, Colombia, Cuba y Perú entre otros países, quienes abordaron temáticas como las zonas económicas especiales, la reinvención de la ciudad y el diseño urbano para discapacitados y adultos mayores, entre otros.En el Salón Narciso Bassols, donde también se desarrollaron las mesas abiertas “Desafíos en la nueva agenda urbana desde el derecho a la ciudad: asentamientos informales y desigualdad”, “Gobernanza metropolitana y consolidación de territorios” y “Proyecto Hábitat Jóven: CLIC! Hacia Hábitat III”, el subsecretario de Ordenamiento Territorial de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Enrique González Tiburcio, moderó la mesa “Zonas económicas especiales y megaproyectos para el desarrollo regional ¿Motor o freno de la transformación económica y social?”.
En esta mesa, Stéphanie Balmir Villedrouin, ex ministra de Turismo de Haití, expuso el proyecto de desarrollo turístico de la “Isla de la Vaca” (lle –a – vaché); Abraham Zamora Torres, director de Banobras, detalló las zonas económicas especiales en México, y Jaime Sobrino, investigador del Colegio de México, abordó las desigualdades territoriales y el proyecto de zonas económicas.
En la Mesa “Reinvención de la ciudad: transformación espacial hacia nuevas vocaciones”, el subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda de Sedatu, Alejandro Nieto Enríquez, subrayó que la urbanización es un fenómeno irreversible, pero deben generarse condiciones de una ciudad compacta, mediante infraestructura, densificación, vivienda, reconversión de uso de suelo, movilidad, relanzamiento de sitios históricos, reconversión de la economía e inclusión.
En esta mesa, moderada por Esther Ponce, directora del Centro de Gestión y Cooperación Internacional para el Desarrollo, el consultor Álvaro Porcuna señaló que la transformación de la urbanización es posible, lo cual ejemplificó con el Plan Estratégico de Revitalización del Bilbao Metropolitano, mientras que Laila Robledo, del Instituto Territorio Municipio y Ciudad, de Argentina, indicó que la baja densidad genera mayores costos, por lo que se debe trabajar en la redistribución de espacios.
Por su parte, Alejandro Franco, director Ruta N, destacó el caso de Medellín, Colombia, que está transitando de una ciudad industrial a una basada en el conocimiento, y actualmente es líder en innovación.
Por otro lado, en la Mesa de Diálogo “Barrios completos: diseño urbano a escala humana”, moderada por Janice E. Perlman, directora de Mega Cities Proyect, Dulce María García Lizárraga, coordinadora de la Maestría en Ciencias y Artes para el Diseño de la UAM Xochimilco, habló de la necesidad de crear entornos accesibles a las personas con discapacidad y adultos mayores, pues habitar significa también estar en un lugar cargado de valores afectivos, simbólicos y temporales, en tanto el presidente de la Organización Latinoamericana y del Caribe de Centros Históricos, Fernando Carrión Mena, expuso que el barrio se define como una subdivisión de la ciudad cuya característica primordial es una identificación cultural que lo distingue de otros.
Por su parte, Regina Rey, profesora de urbanismo e investigadora de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de la Habana y representante de la Federación Latinoamericana de Urbanismo, dijo que el reto es demostrar que los barrios pueden generar riqueza y convertirse en actores más protagónicos y no solo demandantes, mientras que Relinda Melania Sosa Pérez, representante de la Confederación Nacional de Mujeres Organizadoras para la Vida y Desarrollo Integral (CONAMOVIDI) y organización Groots de Perú, habló de la formación de facilitadoras en resiliencia comunitaria y gestión de riesgos de desastres con enfoque de género en laderas de El Agustino.
En la mesa abierta “Desafíos en la nueva agenda urbana desde el derecho a la ciudad: asentamientos informales y desigualdad”, Luis Bonilla Ortiz, director operativo de TECHO Internacional; Juan Pablo Duhalde, director del Centro de Investigación Social de TECHO en Latinoamérica, y Teodora Teresa Márquez Islas, delegada de Agostadero, Valle de Chalco, coincidieron en que es indispensable dotar a las ciudades de crecimiento semiurbano de una identidad basada en la participación de sus habitantes y el mejoramiento del entorno.
En la Mesa “Gobernanza metropolitana y consolidación de territorios responsables”, moderada por Myriam Arabian Couttolenc, presidenta de la Comisión Municipal de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente del ayuntamiento de Puebla, Carlos Islas Contreras y Uziel Rojas, del Instituto Municipal de Planeación de Puebla, expusieron las estrategias y acciones que han implantado en esta materia.
Por su parte, Francisco Valverde Díaz, investigador de la Universidad Iberoamericana Plantel Puebla, destacó que el tejido social se fortalece y actúa en la construcción del espacio habitable, mientras que Isaac Espinosa, investigador de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, explicó el funcionamiento del Laboratorio de Análisis Socioterritorial, en tanto Germánico Pinto, de la Asociación Internacional de Desarrollo Urbano (INTA), indicó que la ciudad es un sistema de sistemas, por lo que hay que comprender sus implicaciones con lo rural, la universalización de servicios, su interrelación con otras ciudades y el papel regulador del Estado.
Finalmente, en la mesa “Proyecto Hábitat Joven: CLIC! Hacia Hábitat III”, los integrantes de esta organización, Ana Cristina Benalcázar, Gustavo Endara, Danaé Espinoza, Jessica Almeraya y Luis Ernesto Álvarez, expusieron el proyecto YoutHab hacia Hábitat III, un proceso de participación colaborativa, colectiva e inclusiva de la juventud, que consiste en una serie de acciones, actividades, intervenciones y eventos relacionados con el hábitat, el derecho a la ciudad y la creación de oportunidades para la participación y la sensibilización de la sociedad civil y en particular los jóvenes.