De acuerdo con la médica Tatiana Van Der Heyden Pardo, especialista adscrita a la Coordinación de Prevención de Atención a la Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Estado de México Oriente, la hemofilia es una enfermedad hereditaria poco común en la cual la sangre no coagula adecuadamente; además afecta, principalmente, a los hombres, y obedece a la deficiencia de factores de la coagulación: Factor VIII o Factor IX.
En el IMSS se cuenta con personal de salud calificado para realizar el diagnóstico correspondiente y otorgar la atención integral. Y es que las personas con este trastorno en la sangre reciben valoraciones de hematología y de grupos multidisciplinarios, dependiendo de los problemas de salud de cada persona con esta enfermedad.
Los más frecuentes son: hemofilia A, cuando hay un déficit o falta de factor de coagulación VIII, y hemofilia B, cuando el déficit o la falta se encuentra en el factor de coagulación IX.
La especialista comentó que los principales signos y síntomas de la hemofilia son: sangrado excesivo, dolor de las articulaciones, sangre en la orina o las heces y la aparición de moretones. Por lo tanto, se requiere de una valoración médica para poder confirmar o descartar este diagnóstico.
La mejor forma de tratar la hemofilia es con un diagnóstico y tratamiento adecuado, el cual consiste en aplicar vía intravenosa el factor deficiente.
Se recomienda a las personas que viven con hemofilia:
- Aplicarse el tratamiento de profilaxis con el factor deficiente que le indicó el médico, no modificarlo o suspenderlo sin antes consultarlo con su médico.
- Si presenta una hemorragia acuda a su unidad médica, para el tratamiento correspondiente.
- Lleve un registro adecuado de hemorragias y de la aplicación del factor, esto ayudará al médico valorar el tratamiento que recibe.
- Realice ejercicio de forma regular, lleve una vida saludable y evite en la medida posible los deportes de contacto y de alto impacto.
- Acuda a sus citas programadas en el IMSS
La especialista reiteró que el IMSS cuenta con personal de salud calificado para diagnosticar oportunamente este tipo de padecimientos y brindar el tratamiento adecuado
También se recomendó a la población en general realizarse chequeos médicos preventivos, mínimo una vez al año, con la finalidad de prevenir o detectar padecimientos que pueden poner en riesgo su salud
Finalmente, Van Der Heyden consideró necesario hacer conciencia de que la enfermedad existe “en la medida en que la conozcamos y la detectemos de manera temprana, y se trate de forma oportuna se contribuye a mejorar la calidad de vida de la persona”.