- La iniciativa del Grupo Parlamentario del PVEM (GPPVEM) busca generar empleos dirigidos a personas de entre 15 y 29 años de edad.
- Con el incentivo se protegería al medio ambiente y se movilizarían comunidades en su favor.
El diputado Héctor Raúl García González (PVEM) propuso, en la LXII Legislatura mexiquense, exentar del impuesto sobre erogaciones por remuneraciones al trabajo personal, a quienes generen empleos destinados a personal entre 15 y 29 años de edad, que desarrollen actividades ambientalmente responsables y busquen la conservación, preservación y cuidado medioambiental.
Ello, por considerar imprescindible que los gobiernos implementen incentivos por la protección del medio ambiente, más allá del reconocimiento a su labor, y que promuevan una mayor participación ciudadana, canalicen recursos hacia actividades sostenibles y fortalezcan una sociedad más comprometida con la conservación del planeta.
Por otra parte, mencionó que a las personas jóvenes les inquieta el acceder a un primer empleo, mayormente a quienes dedican parte de su tiempo a ejecutar y promover acciones en favor del ambiente.
Añadió que, en muchos casos, abandonan sus estudios por falta de recursos, por lo que la iniciativa propone impulsar acciones que les permitan continuar sus estudios y acceder a un primer empleo orientado a la protección ambiental.
El legislador admitió que la falta de incentivos, incluso la baja generación de espacios laborales enfocados en actividades de protección al ambiente, impide la posibilidad de generar un efecto multiplicador que inspire y movilice a las comunidades a ver redituable el trabajo en el sector medio ambiental.
La iniciativa de reforma al Código Financiero expone que, en 2018, sólo 12.5 por ciento de las grandes empresas en México tuvieron personal que participaba en actividades de protección al medio ambiente, con 244 mil 919 personas.
Por actividad económica, las grandes empresas que más personal ocuparon en acciones para cuidar del medio ambiente fueron las de autotransporte foráneo de materiales y residuos peligrosos, los laboratorios de pruebas, así como los comercios de desechos plásticos.