Texcoco, Estado de México.- Los sonidos de una veintena de músicos rompieron el silencio de la apacible montaña texcocana. Los perros ladraban ante el paso del cortejo fúnebre compuesto por unas 200 personas que acompañaban a María Cruz Clavijo, destacada luchadora social de Santa Catarina del Monte y cofundadora de Antorcha en la entidad, para darle su último adiós.
Doña Mari, pionera del trabajo Antorchista en el Estado de México, dejó el plano terrenal el pasado domingo 21 de julio.La ceremonia de despedida fue un reflejo del profundo respeto y cariño que la comunidad sentía por doña Mari. Cientos de personas se reunieron para acompañarla en su último viaje, participando en una solemne peregrinación desde su casa hasta el panteón de Santa Catarina del Monte. La procesión estuvo marcada por un profundo sentido de unidad y solidaridad, valores que María Cruz promovió a lo largo de su vida.
Al llegar al panteón, la escena era una mezcla de naturaleza y humanidad. El pasto crecido por las recientes lluvias cubría el suelo, y entre las tumbas, la gente buscaba lugares para acomodarse y dar el último adiós a “doña Mari”, como le decían con cariño. La vegetación exuberante, junto con las lágrimas y los susurros de despedida, creaban un contraste entre la vitalidad de la naturaleza y la tristeza de la pérdida.
Familiares, amigos y miembros del Movimiento Antorchista se unieron en un momento de silencio y reflexión, despidiendo a una mujer cuya vida dejó una huella imborrable en sus corazones. Doña Mari fue responsable de la primera lechería de DICONSA (entonces CONASUPO) en Texcoco, un logro que marcó un hito en el desarrollo y la autosuficiencia de su comunidad. Además, se le reconoce por su apoyo al inicio de los trabajos del Movimiento Antorchista en Texcoco, que ha llevado progreso y prosperidad a la comunidad, desde la pavimentación del Circuito Kinder, pasando por la instalación de drenajes, el restablecimiento de espacios públicos y techumbres, entre otros, impulsados por esta organización social.
El evento fue presidido por destacadas figuras de Antorcha, incluyendo al doctor Brasil Acosta, líder del Movimiento Antorchista del Estado de México, y la maestra Hersilia Córdoba Morán, dirigente de Antorcha en Puebla. Ambos acudieron para rendir homenaje a una mujer cuya vida y obra dejaron una profunda huella en la historia de su comunidad y de la organización a la que dedicó gran parte de su vida.
En su emotivo discurso, Brasil Acosta destacó las cualidades progresistas de María Cruz Clavijo: “a pesar de haber nacido en 1935, Doña Mari siempre estuvo de acuerdo con las ideas de la organización para ayudar a su comunidad. Fue una progresista, una verdadera visionaria y espíritu liberal, que nunca dejó de luchar por el bienestar de su pueblo”, expresó Acosta, resaltando la dedicación y el espíritu inquebrantable de María Cruz.
En este momento de despedida, la comunidad y el Movimiento Antorchista rindieron un homenaje a una mujer cuyo espíritu progresista y visión para el desarrollo comunitario seguirán siendo una luz guía para todos aquellos que buscan mejorar las condiciones de vida en sus comunidades. Que descanse en paz, María Cruz Clavijo, y que su legado perdure en los corazones y acciones de todos aquellos que la conocieron y admiraron.
Doña Mary inició los trabajos de Antorcha en Santa Catarina del Monte en 1981 con la fundación de la lechería de “Santa Cata” y un proyecto de asesoría de alumnos antorchistas de Chapingo para apoyar a su comunidad. Más adelante lograron drenajes, techumbres, pavimentaciones y la fundación de la preparatoria, entre otros logros que, unidos y organizados, los vecinos han mejorado las condiciones de vida de la gente que vive en Santa Catarina del Monte de la mano del Movimiento Antorchista Texcoco.