Aunque muchos especulaban que el partido de Movimiento Ciudadano estaba cobrando fuerza en el municipio de Ixtlahuaca y podría recuperarlo en esta elección, los argumentos van cayendo por su propio peso dado que el aspirante naranja, José Suárez se ha confiado y se ha tirado en la hamaca frente a un PRI que se mantiene firme pues en las comunidades notan el cambio en sus caminos y calles que fueron pavimentadas en el último trienio.
Y es que la última vez que José Suárez fue alcalde de Ixtlahuaca con el extinto partido de Convergencia, la clase política y la gente ha comenzado a comprender que fue un triunfo pactado desde el poder, pues como se recordará fue en la época en la que 11 diputados locales del PAN se volvieron ‘independientes’ partiendo la fracción azul en dos.
Todo mundo sabe que la mayoría de los diputados del PAN que se volvieron independientes terminaron siendo alcaldes como paso en Ixtlahuaca con José Suárez, o bien, como Leonardo Bravo en Zinacantepec, Juan Abad de Jesús y Gonzalo López Luna en el valle de México, todos ellos por el partido naranja, otros fueron impulsados desde el PRI como Aarón Urbina en Tecamac o Domingo de Guzmán en Villa Nicolás Romero, mientras que los independientes que se fueron con otros partidos como el PRD-PT como Hesiquio López Trevilla, no cuajaron sus expectativas.
En esos tiempos trascendió que, su ayuda para dividir al PAN fue muy bien recompensada tanto económica como políticamente, al grado de que en los pasillos del palacio de Gobierno se advertía que Arturo Montiel Rojas -en ese entonces gobernador- les ayudó a posicionarse como candidatos y luego como presidentes municipales, cosa que no supieron aprovechar para hacer capital político o social, por eso fueron “debut y despedida” como ediles naranjas.
Es claro que hoy, José Suárez no tiene el apoyo del gobernador en turno ni tiene el pago pendiente de la clase política, además de que su ‘brazo derecho’, Felipe Valdés Portocarrero ha decidido abandonarlo y buscar la alcaldía de San Bartolo Morelos, pues es más fácil o hay más trabajo de los militantes naranjas.
En Ixtlahuaca, Movimiento Ciudadano enfrenta a un PRI bien estructurado, un candidato firme, como Juan Carlos Bautista y un trabajo de varias administraciones anteriores, pero sobretodo la actual, donde se ha hecho una inversión histórica de 2 mil toneladas de cemento para pavimentaciones de calles en todas las comunidades, lo que ni en su tiempo logró conseguir el ex gobierno naranja.
Juan Carlos Bautista descansa su campaña en los logros de gobierno que anteceden a su propuesta, pues esta última administración que encabeza Alberto Rebollo Montes de Oca se ha visto sumamente favorecida por el gobernador mexiquense, Eruviel Ávila Villegas, quien reconoce a este municipio con el nuevo nombre que a todos agrada “El Coloso del Norte”.
En Ixtlahuaca, no se habla de hartazgo como en otras partes, por lo que el partido naranja no puede dar por hecho que la gente quiere un cambio de gobierno y el candidato José Suárez no puede aducir los logros que tuvo hace casi 10 años, pues muchos de ellos ya fueron olvidados o superados en las siguientes administraciones.
PARA LA AGENDA JUVENIL… En el distrito local 3 con cabecera en Temoaya no cabe duda que el joven Jesús Antonio Becerril Gasca le está echando muchas ganas poniendo en alto al sector juvenil del PRI, sin embargo, no la tiene fácil dado que tiene algunos contrincantes de peso, por eso, su triunfo pudiera ser más significativo.
La confianza que ha depositado el PRI en los jóvenes como dicho candidato está a prueba y esperan no fallarle a Carlos Iriarte Mercado actual dirigente estatal del tricolor quien es el principal impulsor de esta política. Habrá que ver que cuentas entregan el próximo 7 de junio.