- Niñas y niños son las víctimas ocultas de las medidas de aislamiento social implementadas para prevenir la propagación del coronavirus COVID-19: Jorge Olvera
- *La Codhem llama a las autoridades y a la sociedad a prevenir la vulneración de los derechos humanos de niñas, niños y adolescentes.
Toluca, Estado de México.- Las niñas y los niños tienen derecho a una vida sana, protegida y feliz, en términos generales, la Convención Internacional que establece sus derechos humanos encierra esos conceptos en general, sin embargo la realidad es apabullante ante la alta incidencia de casos de abandono, negligencia y maltrato que prevalece en este país, afirmó el presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem), Jorge Olvera García.
En entrevista telefónica, el ombudsperson señaló que este Día del Niño y la Niña, que por primera vez ha de conmemorarse en condiciones diferentes por la contingencia sanitaria generada por la pandemia del COVID-19, es la ocasión para reiterar el llamado general a respetar los derechos humanos de las personas menores de edad: “no podemos cerrar los ojos ante el hecho de que –como lo ha señalado la ONU-, niñas y niños son las víctimas ocultas de las medidas de aislamiento social implementadas.”
Señaló que la realidad nos está mostrando que niñas, niños y adolescentes están sumamente expuestos al maltrato, la violencia de género, el abuso sexual, la explotación, la exclusión social y la separación de familiares y amigos durante la cuarentena; por eso, esta Defensoría llama a las autoridades competentes y a la sociedad a garantizar la seguridad y el bienestar de las y los menores poniéndolos a salvo de las repercusiones que en todos los sentidos presenta la situación actual, empezando por la violencia en el hogar.
Olvera García detalló que en México, de acuerdo con datos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), 62% de niñas y niños han sufrido maltrato en algún momento de su vida, y en el mundo, 275 millones son maltratados con golpes, insultos, humillaciones y abandono, y muchos son obligados a trabajar, a prostituirse o realizar prácticas pornográficas, mientras que otros más son víctimas del tráfico humano u obligados a enlistarse en el ejército; en este país, dijo, la mayor parte de la niñez enfrenta pobreza extrema, mortalidad infantil y materna, sobre todo en comunidades marginadas e inequidad por condición de género, económica y origen étnico.
Esa situación, comentó, se torna exponencialmente más peligrosa en las condiciones actuales de confinamiento, ya que las y los menores pierden contacto con el exterior, amistades, familia u otras personas que generalmente podrían ayudarlos o protegerlos: “la crisis sanitaria no implica la suspensión de sus derechos”, de ahí también la solicitud a las autoridades competentes para establecer los protocolos de actuación y vías de auxilio que sean necesarios.
En el marco del Día del Niño y la Niña, la Codhem reitera su llamado a la población adulta para evitar conductas de violencia y generar un ambiente familiar armónico de comprensión y respeto a la integridad física y psicológica, de las niñas, los niños y adolescentes: “no cabe duda que el encierro provoca situaciones de estrés, enfado y agresividad tanto en adultos como niñas y niños, pero es necesario que padres y madres de familia estén preparados y les comenten la situación de manera clara, sencilla y tranquilizadora. Lo importante es que se comuniquen y no recurran a actos violentos como medidas disciplinarias que pueden afectar el estado físico y emocional de sus hijas e hijos.”