Este mes de enero empezaron con mucho vigor la mayoría de los alcaldes; aunque a la ciudadanía les resulto sorprendente verlos tan activos y atentos desde el primer momento existe algo claro que muchos ya entendieron: este trienio solo tiene un año productivo y dos años electorales, lo cual resulta muy interesante pues se le agrega que por primera vez estos presidentes municipales podrán gozar de la reelección.Es decir, los nuevos alcaldes solo tienen un año para dejar huella en el electorado que los eligió y que los podría reelegir, dado que el 2017 será un año donde el debate ya no este centrado en las obras o los programas municipales sino en la lucha por el poder estatal, la definición de los candidatos a la gubernatura y el proceso de sucesión de Eruviel Ávila Villegas.
Y posteriormente, el 2018 será un año de contienda presidencial, donde la salida del régimen de Enrique Peña Nieto y la entrada de otro presidente llene la atención de todos los mexiquenses, olvidándose de los trabajos que estén realizando los ayuntamientos que tendrán que soportar las dos vedas electorales, donde no podrán promocionar sus logros cuatro meses por cada año de estos dos últimos.
Por eso, 2016 aunque suene lamentable será el único año que los presidentes municipales destinen para atender las necesidades de la sociedad al 100 por ciento, sin distracciones y con mucho ánimo de ser tomados en cuenta. Los que hagan mejor su trabajo podrán abonarle votos al aspirante a la gubernatura en el 2017 y le sumarán simpatías al candidato presidencial en el 2018, pudiendo negociar o cabildear su permanencia otros tres años mucho más tranquilos.
No hay que dudar que 2018 pudiera ser la muerte para los alcaldes que pretendan repetir pero que no sean de las simpatías del candidato presidencial o bien, un buen candidato presidencial podría arrastrar al triunfo a varios aspirantes municipales. Ejemplos hay muchos, como el Efecto Fox en el 2000, el efecto Peje en el 2006, el defecto AMLO en el 2012 o el efecto Peña en el 2011 cuando se renovó la gubernatura mexiquense y posteriormente en el 2012.
Por eso amigo, lector si ve usted apurado a su alcalde en este primer año, entiéndalo, siente que el tiempo se le escapa de las manos; pero si no lo ve trabajar, APÚRELO, dígale que solo tiene un año para dar su máximo esfuerzo, solo un año productivo y que los otros dos, los perderá haciendo política electorera.
Dígale que usted merece por lo menos un buen año de logros y satisfacciones o de lo contrario terminará votando en contra del candidato a gobernador, del candidato presidencial y sobre todo le negará la posibilidad de la relección para el siguiente periodo.
PARA EL LIBRO LEGISLATIVO… Comentan los que saben que este año será definitivo para la relación que ha florecido entre el Gobierno de Eruviel Ávila Villegas y el PAN Legislativo, pues presentarán ante el Congreso Mexiquense la Opera Prima del sexenio antes del mes de agosto, como ya se ha venido dando, el compositor de la casa de Lerdo 300 entregará la melodía y los movimientos por debajo de la puerta, para que los azules la hagan suya y la presenten como un estreno de su autoría.
El tema es darle más aire al poder mexiquense y tratar de prolongarlo “jugando con lo posible” sin violentar los acuerdo y la lógica que ahora impera en la política nacional y estatal rumbo al 2017 y 2018.
Triste papel será si este favor se hace de gratis por parte de los panistas y no sacan tajada para su partido, en lugar de solo pensar en los bolsillos de unos cuantos.
PARA EL CUADERNO AMARILLO… Al parecer tras los jaloneos por el estire y afloja a nivel nacional en el tema de las Alianzas, el que quedará mejor posicionado será Nueva Izquierda, pues sigue siendo el verdadero interlocutor en los estados donde puede ser el fiel de la balanza para que se concreten o se caigan muy a pesar de otras fuerzas como ADN quienes tienen el control -por ejemplo- en el Estado de México, donde en el 2016 no habrá elección a la gubernatura.
Se caigan o se mantengan, Nueva Izquierda podría navegar en ambos escenarios sin problemas, sin embargo, los demás perredistas tendrían que encontrar otras fórmulas para que las expectativas prosperen. También no hay que perder de vista al presidente de la comisión legislativa de Finanzas, Javier Salinas Narváez, pues en él esta recayendo todo el trabajo para fortalecer a Nueva Izquierda en el estado de México.