- Una buena alimentación es básica para fortalecer el organismo y enfrentar enfermedades como la COVID-19.
- Si se contrajo coronavirus, lo mejor es una buena hidratación, así como evitar refrescos y bebidas azucaradas.
La vacunación y un sistema inmunológico fuerte son actualmente las defensas del cuerpo ante la COVID-19; no obstante, una buena alimentación y hábitos saludables fortalecen de manera previa la protección natural del organismo.
De acuerdo con la especialista Fabiola Rosas Viveros, nutricionista del Hospital General Regional (HGR) No. 72, adscrita al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Estado de México Oriente, si bien no existe una dieta que salve de la COVID-19, son los hábitos de higiene y limpieza, así como una alimentación nutritiva y balanceada previa, lo que permitirá enfrentar de mejor manera la enfermedad.
Aunque cada persona es distinta y los regímenes alimenticios deben diseñarse de manera personalizada de acuerdo con la edad, peso, estatura, actividad física y recursos económicos, señaló que en las comidas se deben incluir alimentos ricos en vitaminas y minerales en la medida de lo posible, como los siguientes:
- Vitamina A: camote, calabaza de castilla, zanahoria, melón, mango, espinaca, brócoli, col y col rizada.
- Vitamina C: chiles, pimiento, guayaba, kiwi, fresa, naranja, col rizada, espinaca, brócoli, toronja, jitomate.
- Vitamina D: yema de huevo, salmón, atún fresco, leche entera.
- Vitamina E: aceite de oliva y girasol, aguacate, cacahuate, almendra y avellana.
- Alimentos ricos en Zinc: cacahuate, queso, yogurt, leche, carne de res y de cerdo, cangrejo, carne oscura de pavo y pollo o sea pierna y muslo.
La nutrióloga exhortó a mantener una buena hidratación si se ha contraído COVID-19. Mencionó que “además de los líquidos, podemos consumir por lo menos tres porciones de verduras y dos de frutas por día, éstas deben ser variadas, preferentemente las de color rojo, naranja y amarillo, ya que son ricas en antioxidantes, vitaminas y minerales, así como elegir lácteos bajos en grasas y evitar refrescos y bebidas azucaradas”.
Recordó no olvidar consumir leguminosas como el garbanzo, frijol, lenteja, así como cereales integrales: pan integral, arroz integral, amaranto y avena. “Debemos seguir una dieta saludable, es decir, una ingesta de energía adecuada que contenga estos elementos además de fibra y proteína”, explicó.
Por último, hizo hincapié que tanto frutas como verduras antes de ser consumidas deben ser lavadas y desinfectadas, así como los utensilios y superficies que utilizamos para evitar contagios por COVID-19.