- El fondo de libros antiguos de la institución tiene como objetivo preservar el material bibliográfico con el que cuenta la institución.
Toluca, Méx.– El fondo de libros antiguos de la Universidad Autónoma del Estado de México, conformado por más de seis mil ejemplares, cuenta con libros que datan del siglo XVIII, por ejemplo, enciclopedias editadas cuando el escritor francés Voltaire aún vivía, así como un importante acervo de ingeniería y jurisprudencia.
El coordinador de la Biblioteca “Aurelio J. Venegas” del Centro de Investigación en Ciencias Sociales y Humanidades (CICSyH) de la UAEM, Ignacio Bárcenas Monroy, afirmó que este espacio universitario es uno de los que más libros antiguos tiene.
El fondo, detalló, tiene como objetivo preservar el material bibliográfico con el que cuenta la institución, así que comprende libros editados antes de 1956, año en que el Instituto Científico y Literario Autónomo (ICLA) se transformó en la Universidad Autónoma del Estado de México.
Precisó que dentro de este fondo se encuentra un ejemplar de Sobre la teoría de la relatividad especial y general firmado por el propio Albert Einstein; asimismo, se encuentra un libro del dramaturgo, poeta y ensayista francés Paul Claudel firmado por él mismo.
Todos los ejemplares del fondo antiguo, aseveró, están en proceso de digitalización, ya que varios tienen un desgaste considerable. “De esta manera, alumnos e investigadores podrán utilizar el material. Quienes lo deseen podrán consultarlo”.
La biblioteca del CICSyH, subrayó, cuenta con alrededor de 25 mil ejemplares, abarca todas las áreas del conocimiento y está integrada por varios fondos, entre ellos, el del Instituto Científico y Literario Autónomo.
Así que este proyecto, dijo, es histórico para la máxima casa de estudios mexiquense, ya que además, permitirá a los universitarios conocer las raíces de la UAEM.
“Estos documentos nos permitirán rastrear nuestra identidad como universitarios. Hay material suficiente para incentivar investigaciones en todas las áreas del conocimiento”, concluyó Ignacio Bárcenas Monroy.