- En particular, los títulos profesionales contienen una docena de candados de seguridad y están registrados ante la Dirección General de Profesiones de la Secretaría de Educación Pública.
Toluca, Méx.- En el marco de la inauguración del ciclo escolar 2019-2020 de la Universidad Autónoma del Estado de México, que se llevó a cabo en la Unidad Académica Profesional UAEM Acolman, el gobernador Alfredo Del Mazo Maza y el rector de esta casa de estudios, Alfredo Barrera Baca, realizaron la entrega simbólica de nuevos títulos profesionales a tres egresados de las facultades de Planeación Urbana y Regional, Arquitectura y Diseño y Odontología.
Con el propósito de modernizar y agilizar los trámites para la entrega de títulos y grados académicos que emite, la Autónoma mexiquense expide una nueva versión de estos documentos, que incluyen diversas medidas de seguridad para prevenir la falsificación.
Los documentos están elaborados en papel sintético de alta seguridad y resistente al agua; los escudos impresos de la institución son sensibles a la luz ultravioleta y contienen microtexto. Del lado izquierdo de la fotografía aparece una línea vertical que contiene una leyenda con microtexto.
En particular, los títulos profesionales contienen una docena de candados de seguridad y están registrados ante la Dirección General de Profesiones de la Secretaría de Educación Pública, así como el Sistema de Control Escolar de la UAEM.
Asimismo, contienen la impresión, con tinta de seguridad, de la leyenda “Patria, Ciencia y Trabajo”. En tanto, las firmas del rector, de los secretarios y del director del organismo académico universitario que expide el documento están registradas de forma autógrafa y electrónica, por lo que tienen validez oficial ante el Servicio de Administración Tributaria.
Cuentan con un código QR que al leerse permite corroborar su autenticidad; además, la fotografía del titular del documento está bloqueada por una mica que contiene un holograma de seguridad.
Esta tecnología permite a la institución agilizar la entrega de documentos, que anteriormente podía tardar hasta seis meses, ya que, por ejemplo, los títulos eran elaborados en piel de cabra.