La diputada federal por el Estado de México Martha Azucena Camacho, secretaria de la Comisión de Economía Social y Fomento del Cooperativismo, urgió la necesidad de supervisar que los municipios mexiquenses cuenten con plantas tratadoras de aguas y les den mantenimiento, como la ley ya lo obliga, e inviertan en sistemas de captación de agua pluvial, como alternativas para paliar la crisis hídrica.
Recordó que, por ley, “cada fábrica ya tiene la obligación de contar con su planta de aguas negras o de tratamiento y cada municipio tiene que tener su planta tratadora de aguas, residuales muchas de ellas”, pero sólo algunos las tienen, y entre ellos, muchas no sirven.
Por eso, consideró necesario que la ley se aplique y se sancione a quienes la incumplen, por lo que resulta urgente revisar el cumplimiento de la norma y sancionar su desacato.
La legisladora indicó que con estas disposiciones de ninguna manera se trastoca el artículo 115 constitucional que tutela la autonomía municipal, pues ya se encuentra considerada en la norma mexiquense la obligatoriedad de los ayuntamientos de tener plantas tratadoras de agua, de manera que lo que procede es cuestionar quién supervisa que se acate la disposición y sanciona su incumplimiento.
Estas medidas, junto con la separación de aguas negras de las pluviales, planteó, forman parte de un paquete que en los próximos días revisarán conjuntamente integrantes de la Legislatura mexiquense y de la Cámara Baja del Congreso de la Unión, con miras a encontrar soluciones en épocas de escasez del vital recurso.
“Para que el Estado de México no tenga problemas de desabasto de agua potable, debe trabajarse en conjunto, en una inversión de captación de aguas”, añadió.
Finalmente, dijo que se debe garantizar un presupuesto a los municipios para que cuenten con infraestructura de captación y tratamiento de agua de lluvia y que las fábricas tengan planta para tratar el vital líquido, pues de lo contrario cada día tendremos menos agua potable para consumo y uso humano.