- Se debe aprovechar el potencial y capacidades de la juventud: Carmen de la Rosa.
- Hasta 2015 existía una población de mil 650 menores; 25 por ciento estaban por cumplir la mayoría de edad.
El Congreso del Estado de México aprobó por unanimidad que las y los adolescentes que viven en los centros de asistencia social públicos y privados de la entidad reciban educación y capacitación para el trabajo, con el fin de que, cuando alcancen la mayoría de edad y salgan de dichos centros cuenten con herramientas para reintegrarse plenamente a la sociedad como sujetos económicamente activos e independientes.
De acuerdo con las reformas a las leyes de Asistencia Social y la que Regula los Centros de Asistencia Social y las Adopciones de la entidad, la juventud que egresa de casas hogares lo hace con herramientas precarias, insuficiente apoyo y escaso acompañamiento para iniciar su vida independiente, por lo que enfrentan el dilema de vivir en la calle o regresar al hogar del que fueron separados cuando eran niños.
En sesión deliberante, la diputada María del Carmen de la Rosa Mendoza, autora de la iniciativa, se manifestó a favor de que el sistema de protección de niñas, niños, adolescentes y jóvenes pase de ser meramente asistencial a ofrecer todos los elementos y apoyos para conseguir que se integren a un sistema de restitución real de derechos, siempre con miras integrales potenciadoras de sus capacidades y habilidades.
La reforma también señala que se establezcan y lleven a cabo programas interinstitucionales que aseguren la atención integral de los beneficiarios de esta ley, y el seguimiento de las y los adolescentes que egresen de los centros de asistencia social en virtud de hacer cumplido la mayoría de edad. Conforme a la propuesta, la entidad en 2015 tenía un registro de mil 650 menores y adolescentes residentes de estos centros de asistencia social, de los cuales 25 por ciento estaban por cumplir la mayoría de edad.