Debido principalmente al estrés, la esperanza de vida en hombres y mujeres que ocupan cargos directivos, jefaturas e incluso, que se dedican a la enseñanza, disminuye hasta 10 años, refirió el especialista del Centro de Investigación y Estudios Avanzados de la Población (CIEAP) de la Universidad Autónoma del Estado de México, Sergio Gaxiola Robles Linares.El profesor de tiempo completo de la UAEM, quien analiza temas referentes a mercados de trabajo, pobreza y envejecimiento, entre otros temas afines, detalló que, por ejemplo, para el caso de las mujeres que ocupan cargos de alta responsabilidad y quienes, en promedio, podrían vivir hasta los 72.1 años, se reporta alcanzan una esperanza de vida hasta los 60 años.
La carga horaria y el constante sometimiento a un ambiente de presión profesional, pero también hábitos sedentarios, contribuyen de forma determinante a la disminución de la calidad de vida de este sector de la población económicamente activo, indicó el experto universitario.
Sostuvo que a diferencia del grupo que pertenece al trabajo manual no calificado, quienes se dedican a las tareas que requieren principalmente de la utilización de herramientas manuales y de un esfuerzo físico, el grupo de trabajo no manual y calificado demanda de una práctica intelectual constante para llevar adelante trabajos que implican decisiones y amplias responsabilidades.
Tras referir que los datos fueron obtenidos a través de las investigaciones que realizan profesores y especialistas del CIEAP de la Máxima Casa de Estudios mexiquense, Sergio Gaxiola Robles Linares subrayó la necesidad de conocer los factores laborales que determinan la morbilidad de la población.