- Expertos del Centro Conjunto en Química Sustentable UAEM-UNAM proponen el reactor filtro-prensa con electrodos reticulados, sistema que funciona a través de energía controlable.
Toluca, Méx.- Convertir el dióxido de carbono en productos de valor para generar energía sostenible es uno de los objetivos que persigue Gabriela Roa Morales, investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx).
A través del proyecto “Conversión electroquímica de dióxido de carbono (CO2) a productos de valor con un reactor filtro-prensa y electrodos reticulados”, financiado por el Consejo Mexiquense de Ciencia y Tecnología (Comecyt), Gabriela Roa busca implementar alternativas para la disminución de temperaturas altas provocadas por los gases de invernadero como el dióxido de carbono.
El dióxido de carbono en la atmósfera produce radiación térmica, afectando vías respiratorias e incrementando la contaminación de agua, suelo y aire, así como la presencia de ondas de calor.
Las afectaciones a la población pueden ir desde desmayos, deshidratación, golpes de calor y enfermedades en la piel hasta la presencia de lluvia ácida. “Si hablamos de que se encuentra presente en la atmósfera, puede producir lluvia ácida. Durante la precipitación es absorbida y, posteriormente, evaporada por diversas capas. Termina siendo un ciclo continuo donde se generan distintos contaminantes”, comentó la Doctora en Ciencias.
Por ello, desde el Centro Conjunto en Química Sustentable UAEM-UNAM, Gabriela Roa Morales y su equipo proponen el reactor filtro-prensa con electrodos reticulados, sistema que funciona a través de energía controlable. En este caso, utiliza el níquel reticulado, que debido a su composición porosa, logra abarcar una mayor área, posibilitando la reacción química necesaria. “Primero capturamos el dióxido de carbono en una solución acuosa. Al tener un contacto con el níquel y aplicar la energía obtenemos productos de valor como metanol y ácido fórmico”, explicó Roa Morales. Al obtener dichos compuestos, son tratados para aplicarlos como reactivos en celdas de combustible, con el fin de generar energía.
Los resultados de la investigación contribuirían a los Objetivos de Desarrollo Sostenible propuestos por las Naciones Unidas para garantizar la prosperidad y paz del mundo en 2030. Uno de ellos, el acceso a una energía asequible y no contaminante.
Actualmente, el proyecto se encuentra en etapa de análisis y tratamiento de los productos de valor. Ante esto, la especialista ambiental resalta la importancia de programas que propicien el financiamiento de investigaciones científicas para la continuación de las experimentaciones.
Finalmente, Gabriela Roa Morales reconoció la labor de las mujeres científicas, quienes constantemente desempeñan distintos roles en conjunto con su profesión. Ante esto, resalta la importancia del involucramiento de familiares, parejas y amigos para evitar la sobrecarga en tareas relacionadas con el hogar y cuidado, así como el trabajo en conjunto de la comunidad científica para estimular el interés de la ciencia en niñas y adolescentes.