Desde Playa del Carmen, Quintana Roo, llegó al Museo del Barro “Leyendas del Mayab”, representación que combinó teatro de sombras, títeres y música prehispánica en vivo con animaciones proyectadas y temática que busca difundir y conservar la cultura maya.Los integrantes han pisado escenarios en la Muestra Estatal de Teatro de Quintana Roo y por primera vez se presentaron en el Festival Quimera. El objetivo de la obra es conservar las leyendas del grupo étnico ancestral, contándolas de una forma divertida, versátil y novedosa, siempre resaltando los valores, sobre todo la trascendencia del amor.
La directora general de la obra, Carla Pedroza, mencionó que para su equipo y para ella es trascendental presentarse en un festival de la talla de Quimera, puesto que es una oportunidad que seguramente le abrirá más puertas.
La historia comenzó con una mujer maya contando al público la importancia de las costumbres y leyendas más populares de Quintana Roo, en una pantalla de sombras que transportó al público a la tierra del Mayab.
En seguida, narró cómo en las grandes selvas del lugar, el “Cocay”, una luciérnaga nativa adquirió la elegante luz que vemos brillar cada noche, historia que simboliza la luz interior que trae consigo cada ser humano.
Asimismo, el público escuchó la leyenda de “Nicté-ha”, una flor que se puede encontrar en los cenotes y es contemplada por los pájaros cardenales con devoción. El origen según la obra, se remonta a la historia de dos enamorados condenados a una relación imposible, no obstante, empeñados en consolidar su amor planearon casarse a escondidas, pero en el intento fueron descubiertos por una sacerdotisa que mató a la mujer; de este modo los dioses los convirtieron, a ella en un hermoso lirio y a él en un ave de color rojo, el cardenal.